La Reserva Federal de EE.UU. ha optado por subir los tipos de interés en otros 25 puntos básicos, después de su última reunión de política de dos días. Esto representa el décimo aumento consecutivo en un año, ya que la lucha contra la inflación se intensifica. A pesar de las preocupaciones sobre la crisis bancaria en curso, la Fed ha priorizado la lucha contra la inflación, aumentando la tasa de interés a un rango objetivo alterado de 5 a 5,25%, el nivel más alto desde 2007.
El aumento de la tasa de interés ha llevado las tasas por encima del 5%, lo que podría tener efectos adversos en los mercados inmobiliario y laboral. Además, la situación del sector bancario ha generado llamamientos generalizados para detener las subidas de tipos de interés. Aunque la Fed sigue buscando bajar la inflación a su objetivo del 2%, con una serie de facetas macroeconómicas en juego, simplemente buscar ese número se vuelve más complicado.
Este aumento en los tipos de interés llega en un momento en que el First Republic Bank ha sido incautado por el gobierno de EE. UU., convirtiéndose en el tercer banco en enfrentar ese destino. La situación del sector bancario ha generado preocupaciones inflacionarias y bancarias, y es probable que la Reserva Federal considere seriamente una pausa en las subidas de tipos de interés en su próxima reunión.
En definitiva, la Reserva Federal ha emprendido su lucha más agresiva contra el aumento de las tasas de inflación en décadas, y parece estar priorizando la lucha contra la inflación sobre las preocupaciones del sector bancario. El aumento de los tipos de interés podría tener efectos adversos en los mercados inmobiliario y laboral, y es probable que la Fed considere seriamente una pausa en las subidas de tipos de interés en su próxima reunió
